Reflexiones

Con la era de la globalización en los países desarrollados han ocurrido diversos cambios en cuanto al concepto de educación y trabajo, en la que con la entrada sociedad del conocimiento y de la información, se requieren personas cada vez más preparadas para desempeñar sus labores, sin embargo, ocupan puestos de trabajo que están por debajo de sus cualificaciones. Necesitamos competencias trasversales, por lo que se contempla la carrera como medio no como fin.

Con la rapidez con la que funciona la economía, es casi imposible que las empresas se adapten a los requerimientos de esta, al igual que las personas a las empresas ya que cada vez más es la incidencia a alargar la formación de estas.

Comentar que los jóvenes cada vez tienen más problemas para insertarse en el mundo laboral ya sea por el aumento de la población envejecida provocando que sean los adultos los que mantenerlos, por lo que el gasto social que ocupa es en demasía. Por ello las políticas de corte neoliberal apuestan por la rápida inserción laboral de los jóvenes, pero requiriendo innovación y ocupando puestos por debajo de sus competencias.

Los empresarios han podido beneficiarse de la elevación del nivel de educación general de los asalariados con una mano de obra más flexible, más adaptable que les ha permitido disminuir los costes de inserción.

Educar la creatividad como solución a que las empresas necesiten perfiles profesionales cambiantes.

Por otro lado, todo lo que conlleva este ritmo de la economía globalizada genera unas desigualdades notables debido a que las personas de clases sociales bajas, cada vez tengan más dificultades a la hora de insertarse al mercado laboral.

Se detectan problemas como pueden ser la falta de vocación, por lo que nos planteamos si los títulos no tienen interés, o la gente no le pone interés a los títulos, si son un imaginario social o un hecho, pensamos en la gente que estudia derecho creyendo en la justicia, o estudia magisterio queriendo transformar el mundo y cuánta de esta acaba derecho o magisterio pensando igual.

Otro de ellos en los que pensamos es la subocupación ya que “825.000 trabajadores tienen una certificación escolar superior a la categoría laboral que detentan”. “4.936.000 trabajadores no tienen una certificación escolar acorde con las categorías laborales detentadas”.

Apostando por una escuela de calidad para todos podremos combatir esa transición de la escuela al trabajo apostando por una formación en la innovación e íntegro desarrollo personal.

Como educadoras sociales debemos de comenzar a hacer que la población sea consciente de la importancia de la educación y con ello del desarrollo de su identidad, de sus capacidades y habilidades para todos, ofreciendo oportunidades para toda la sociedad como lo primordial para más tarde, dar cabida a adaptarse a las exigencias de una vida laboral cada vez más globalizada.